¿Cómo cuidar de la piel después de afeitar?

Uno de los factores con mayor peso a la hora de elegir una barbería, definitivamente son los resultados. Más allá de cómo luce, los clientes tienen mucho en cuenta los días posteriores a la visita para definir si volverán o si continuarán en la búsqueda. Es aquí cuando el cuidado de la piel post-afeitado puede hacer la diferencia para quienes te visiten. Sin importar el tipo de productos o rutina que utilices, el cuidado de la piel se compone de 4 puntos básicos . En base a ello, te hemos enlistado algunos tips:

Preparación
Antes de afeitar es sumamente importante prepara la piel para evitar que se sienta seca o tirante al terminar. Para ello es necesario lavar el rostro para suavizar la barba y eliminar polvo y otros elementos del ambiente que podrían dificultar el paso de la cuchilla. Para esto es posible ayudarse de distintos productos de higiene que existen en el mercado, aunque se recomienda no frotar el jabón directamente en la piel.

• Exfoliación
  Aunque puede sonar extraño, en ocasiones es necesario exfoliar el área a rasurar para evitar que las partes más cortas de la barba se claven en la piel. Esto minimiza el riesgo de pequeñas heridas o de dificultades durante el proceso. Para este propósito existe gran cantidad de productos especializados en los diferentes tipos de piel.
  
  
• Técnica
  Muchas veces la presión excesiva de la cuchilla sobre la piel, o el pasarla demasiado rápido, puede generar descamación al interferir con capas de piel más nueva. Antes de iniciar asegúrate de conocer el tipo de piel de tu cliente para utilizar el gel o espuma que coincidan más con sus necesidades. Esto tendrá un mejor efecto sobre su rostro.
  
  
• Hidratación
  El secreto de una afeitada suave es la hidratación, ya que esto suaviza no solamente la piel, sino también el vello facial. De este modo será mucho más fácil acomodar y recortar para darle la forma deseada. Asimismo, al terminar es necesario utilizar un aftershave o algún otro producto para mantener hidratada la piel aún después del proceso. Esto no sólo evitará la sensación de tirantez, sino también prolongara el efecto de recién afeitado que hace que la barba luzca pareja e impecable, lo cual se verá reflejado en la comodidad del cliente.
  
  

Para complementar la experiencia de tu cliente, puedes añadir pequeños detalles que le ayuden a relajarse durante el proceso. Muchas veces factores sencillos como las sillas, la música que hay en tu local o hasta la temperatura del lugar pueden transformar a un visitante de paso en un cliente frecuente.

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